Nos
cuenta Juancho que Montegrande era un bosque de árboles de algarrobo muy grande
y encantado se encuentra en las afuera de Reque.
Un día
como hoy el veterano Juan Guillermo se iba a recoger leña como de costumbre
acompañado de su menor hijo y estando en el bosque cortando la leña de la nada
se desaparece su hijo menor, el señor desesperado comenzó a llamarlo, viendo
que no lo podía encontrar fue a pedir
ayuda a los vecinos de Cayanca y de Monsefú y a sus familiares también, tanto
de buscarlo todo el día ya gran parte de la noche.
Juan,
cansado de buscarlo, regreso al segundo día a recoger sus cosas que había recogido
leña, se encontró al niño. En el mismo lugar que lo había dejado. Lo encontró que
estaba contando dinero que el niño había recogido de un cerrito y el señor con
el dinero que había encontrado su hijo se volvió millonario.